- Para empezar Pokerstars se quita de en medio de un plumazo al único gran competidor que tenía en el mercado del poker online, se adueña de la compañia enemiga, de su software (el cual piensan mantener), y de toda su base de jugadores. Es evidente que tarde o temprano la gran mayoría de esos jugadores volverán a ingresar sus banks bien en Full Tilt Poker bien en Pokerstars (si es que deciden retirarlos).
- Por otro lado el acuerdo con el Departamento de Justicia norteamericano incluye que a nivel empresarial tanto Full Tilt Poker como Pokerstars quedan libres de todos los cargos. No así los casos particulares demandados en el Black Friday ((Ray Bitar, Rafe Furst, Howard Lederer, Chris Ferguson y Nelson Burtnick, de Full Tilt Poker, e Isai Scheinberg y Paul Tate de PokerStars) sus juicios seguirán adelante, pero en nada afectarán a las compañias.
- Por último en el acuerdo se contempla que PokerStars y Full Tilt podrán optar a los futuros procesos de licencias, ya sea a nivel federal o estatal, que puedan abrirse tras la legalización del poker online en Estados Unidos.
La inversión de Pokerstars ha sido fuerte, pero la recompensa como podemos ver no es menor, un gran paso adelante no solo para finiquitar el tema Black Friday, sino para eliminar a su máximo competidor del mapa y dejar una compañía impoluta, lista y preparada para operar en todo el mundo, incluidos los Estados Unidos cuando allí se decida regularizar el juego online.
Se calcula que con este movimiento Pokerstars se ha hecho con el 80% del mercado del poker online a nivel mundial. Se dice pronto, pero el 80% es casi, TODO el mercado. De libro señores de libro...
Saludos.
0 comentarios:
Publicar un comentario